Todas las empresas saben cómo poner a prueba nuevas iniciativas digitales en tiempos «normales», pero muy pocas lo hacen a la escala y velocidad repentinamente requeridas por una crisis como la del Coronavirus (Covid-19). Esto se debe a que en tiempos normales, las penalizaciones del cliente y del mercado por «probar y aprender» pueden parecer demasiado elevadas además de los grandes obstáculos organizacionales que surgen en el camino, para los accionistas que exigen rendimientos inmediatos esto es un reto.
A medida que la crisis sanitaria obliga a los clientes, empleados y cadenas de suministro a implementar canales digitales y nuevas formas de trabajo, es el momento de preguntarse: ¿Cuáles son las acciones digitales que hemos dudado en llevar a cabo en el pasado, incluso cuando sabemos que eventualmente serían necesarios? Por extraño que parezca, en este momento de crisis, es precisamente el momento de avanzar con valentía en la agenda digital. A continuación, exponemos las acciones que según el estudio realizado por la consultora Global McKinsey & Company, están llevando a cabo las grandes empresas para operar con éxito hacia la nueva normalidad.
1. Más digitalización de procesos: La mayoría de las organizaciones están buscando reemplazos virtuales para sus ofertas físicas, o al menos nuevas formas de hacerlas accesibles con un contacto físico mínimo. Las nuevas ofertas a menudo pueden involucrar nuevas asociaciones o la necesidad de acceder a nuevas plataformas y mercados digitales en los que tu empresa aún no ha participado. A medida que se relacione con nuevos socios y plataformas, hay que buscar oportunidades para ir más allá de las zonas de confort mientras obtiene visibilidad de los lugares en los que puede invertir con confianza tiempo valioso, personas y fondos para su mejor efecto.
2. Transparencia y flexibilidad en la cadena de suministro: Construir la transparencia y flexibilidad los algoritmos para detectar cambios en el patrón de compra y transparencia de datos durante la crisis mitigará la interrupción de la cadena de suministro durante la crisis.
3. Seguridad de datos. La seguridad ha estado de manera constante en las noticias, ya sea la seguridad de las personas mismas o la de los bienes y datos. Zoom logró navegar con éxito la rápida escala de su volumen de uso, pero también se encontró con retos de seguridad, mismos que han logrado superar gracias a un a respuesta inmediata y el uso de la tecnología.
4. Fuerzas de trabajo remotas y automatización. Se deben aprovechar la flexibilidad y la diversidad que brinda el trabajo remoto. Aprender a mantener la productividad, incluso cuando regresemos a los edificios de oficinas después de que finalice el cierre, e incluso cuando las empresas continúen automatizando actividades, será fundamental para capturar el mayor valor de este experimento del mundo real que está ocurriendo. En el comercio minorista, por ejemplo, existe un uso generalizado de robots en la tienda para hacerse cargo de más tareas transaccionales, como verificar el inventario en los pasillos de las tiendas y el cumplimiento remoto de pedidos. Estas inversiones no desaparecerán después de la crisis, y las que lo hayan hecho se encontrarán en una estructura de costos ventajosa durante la recuperación.
5. Potencia el trabajo en equipo: La investigación indica que las personas y las organizaciones aprenden más rápidamente como resultado de los efectos de trabajar en equipo. Cuantas más personas u organizaciones agreguen a un espacio de solución común, más rápido se produce el aprendizaje y el rendimiento mejora más rápido. Algunos argumentan le llaman a esto curva de colaboración.
A menudo, las mejores lecciones surgen de los tiempos de mayor crisis, las empresas que pueden atender y superar simultáneamente las demandas críticas y cotidianas pueden obtener ideas únicas para una respuesta eficiente y ayudar a garantizar que su futuro digital sea más sólido al salir de COVID-19 de lo que estaba antes.